Era invierno y hacía mucho frío, no podía seguir en la calle, así que me escondí en el motor de un coche para refugiarme. Por una casualidad me encontraron y me enviaron a LARA, donde me cuidan y me dan de comer todos los días. Todavía estoy un poco asustado, pero se me va pasando porque aquí los humanos me tratan bien.
Todavía soy un bebe, me das una oportunidad y me llevas contigo?
Las adopciones se realizarán en la comunidad de Madrid y poblaciones cercanas.