Me llamo Miko y vengo de Andalucía - Huelva, me abandonaron en la calle, al lado de una carretera donde mi vida corría peligro, tuve suerte y no fui atropellado, pero tuve que pasar dos años de mi vida en la dura y fría acera. Nadie se apiadaba de mí, no me recogían y eso que yo era un gato muy bueno, sólo pedía a la gente un poco de comida y cariño, me ponían de vez en cuando comida pero nadie me llevo a su casa hasta que un día me vieron una chicas y decidieron que no podía seguir en la calle, se pusieron en contacto con LARA y las dijeron que me enviasen ya que mi situación era muy seria y los vecinos amenazaban con acabar con mi vida.

Llegué al albergue y los primeros meses estuve muy asustado, me escondía en las cajas, volvía locas a mis cuidadoras, porque me escondía tan bien, que pasaban muchas veces más de media hora para encontrarme, y se preocupaban pensando que me había pasado algo. Pero poco a poco empecé a tener confianza con ellas y las demás personas, y así fue como empecé a salir de mi caja, y a pedir mimos, demostré lo bueno que era y que me encanta pasar mi cara por sus caras y que me acaricien la tripa, aún no me dejo coger en brazos, pero poco a poco lo haré.

Me llevo muy bien con todos los peludines, soy muy tranquilo aunque también me gusta jugar y me encantaría encontrar un hogar donde no vuelva a pasar ni miedo ni frio.

Estoy llevando una dieta puesto que he engordado bastante y necesito adelgazar. Sería genial si encontrase un hogar donde puedan vigilar lo que como y ayudarme a adelgazar.

¿Me ayudas a encontrar un hogar?

Contacto: adopciones@asociacionlara.org 

Montse: 691598283