Me llamo Laro, fui rescatado de una obra en construcción cuando era pequeño. Tuve suerte y me fui adoptado junto a mi hermano Chipi.

Al ser los dos gatos tímidos nuestros adoptantes no podían tocarnos mucho, el problema empezó cuando empecé a marcar, les dijeron que me esterilizasen que ya estaba dejando de ser cachorro y había que hacerlo,  sin embargo no quisieron hacerlo y nos devolvieron a los dos.

Me encantaría volver a encontrar un hogar donde confíen en mi y tengan paciencia para poder confiar en ellos. Quien me de la oportunidad debe saber que necesito tiempo y mucha paciencia y que aunque no consigan llegar a tocarme les estaré eternamente agradecido. ¿Me ayudas a lograr mi sueño?

Contacto: adopciones@asociacionlara.org